7

De a poco se fue haciendo de noche y un monstruo saco su guitarra. No eramos muchos pero estábamos juntos y eso es lo importante.

Invisible

-Uy, no te vi.- Me disculpe preocupada.

-Nadie lo hace- Me respondió.

-Vos también estas todo despeinado y me confundo.- Le recriminé.

-¿Despeinado?

-Si, con los pelos locos.

-Y ¿Qué hago?

-Y, no se, lo mejor es que seas vos mismo. Así te aseguro te ve todo el mundo.

6

Había un monstruo invisible y otro con una guitarra.

Gritón

-Para, tranquilo.- Le reclame al monstruo atolondrado.

-NOOOO.- Me gritó.

-Pero ¿Porque gritas?

-PORQUE NO ME ESCUCHAN!!

-Yo si… ¿Quién no te escucha?- Pareció calmarse.

-LOS MONSTRUOS GRANDES.

-Son medios raros los grandes, siempre preocupados en sus cosas. Yo                                                     si te escucho.- Lo abrasé.

-Gracias.- Me dijo.

-De nada- Le respondí.

Dormilón

-Hola.

-ZZZ

-¿Vos como te llamas?

-ZZZ

-¿Siempre dormís?

-ZZZ

-¿Y porque dormís?

-ZZZ

-Se ve que soñar tanto tampoco esta tan bueno.

5

Habia un monstruo muy dormilón y otro gritón.

Dientotes

-¿A vos te gusta comer niñes?- Pregunte asustada.
-Me gusta mas el helado.

Abrazon

-A mi me gusta dar abrazos- Me dijo.
-¿Porqué?- Pregunte curiosa.
-¿Porqué no?

4

Habia un monstruo muy grandote y otro con dientes muy largos.

Llorón

-¿Y vos porque lloras tanto?- Le pregunte al monstruo.
-Porque soy feo- me respondió.
-¿Feoooo?- Le pregunte sorprendida.
-Si, feo.
-¿Segun quien?
-Según los otros monstruos.
-¿Y que importan los otros monstruos? Para mi sos muy bonito.
-¿Enserio?
-Enserio, que nunca te hagan creer nada.Vos sos todo lo hermoso que te sientas.

3

Había un monstruo muy alto y otro que no paraba de llorar.

Enojon

-¿Y vos porque estas enojado?- Le pregunte medio asustada.
-Porque no quiero compartir mis juguetes.
-Pero si compartis tus juguetes vas a dejar de jugar solo.
-Grrr.
-Tenes que aprender a compartir.
-Grrrrrrr.

Peludo

-Hola pequeña niña ¿Es cierto que vos ya no dormís con la luz prendida?- Me pregunto el monstruo amablemente
-Si, es cierto.- Le respondí segura.
-¿Y como hiciste? Porque a mi me da miedo la oscuridad.

2

Había un monstruo peludo y otro enojón.

1

Una vez, por despistada, me equivoque y me fui directo a La Isla de Les Monstrues. Al llegar al puente me di cuenta de mi error, pero ya no quería dar marcha, la curiosidad me ganaba.

Mientras más me adentraba en la isla más monstrues veía

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